Localización: La clave del éxito internacional

Los hábitos de compra llevan tiempo alejándose del comercio físico y acercándose al comercio electrónico, pero la pandemia del COVID-19 ha acelerado enormemente este cambio. Los consumidores se han dado cuenta de lo sencillo y cómodo que es comprar online, hasta el punto de que, según eMarketer[1], en 2020 hubo 170 millones más de compradores online que el año anterior, lo que supone un total de 2.280 millones de compradores digitales en todo el mundo.

La popularidad de las compras online también se extiende a las compras online en tiendas de otros países, o comercio electrónico transfronterizo, impulsado por los consumidores que buscan marcas o productos no disponibles en su país de origen y precios más competitivos. El crecimiento del comercio electrónico transfronterizo y directo al consumidor crea una enorme oportunidad de mercado que se espera que alcance más de 700.000 millones de dólares[2] en 2023 y que crezca el doble de rápido que el comercio electrónico nacional[3].

El comercio electrónico internacional permite a los minoristas y a las marcas aumentar sus ingresos y su base de clientes en lugar de centrase únicamente en su mercado nacional o en un número limitado de mercados internacionales clave. Sin embargo, para que las ventas transfronterizas crezcan con éxito, es fundamental ofrecer a los compradores internacionales la misma experiencia de compra online que en los sitios web nacionales. Existen muchas barreras que impiden a los compradores internacionales realizar un pedido, como la imposibilidad de pagar en su moneda local y con su método de pago local preferido, las tasas e aranceles que se deben pagar al importar productos, los envíos lentos y caros y los complicados procesos de devolución, todo lo cual tiene un impacto negativo en las tasas de conversión internacionales. Los compradores online que experimentan dificultades al tratar de comprar en el extranjero tienen una alta probabilidad de abandonar su cesta y buscar una marca más fácil de usar en el que hacer su pedido.

Entonces, ¿qué pueden hacer los minoristas de comercio electrónico para asegurarse de que sus clientes internacionales estén bien atendidos?

Ofrecer precios y opciones de pago localizados

Los datos de Global-e han demostrado que más del 95% de los compradores internacionales en línea eligen pagar en su moneda local cuando se les da la opción. Además, en muchos mercados de todo el mundo, los métodos de pago locales y alternativos se utilizan comúnmente y se prefieren a las tarjetas de crédito internacionales. En China, por ejemplo, la mayoría de los pagos en línea se realizan a través de AliPay, WeChatPay y UnionPay. En otros países, el contra reembolso son opciones de pago populares.

Evitar tasas inesperadas para los clientes en el momento de la entrega

Las tasas de aduana y los impuestos son un obstáculo adicional para las compras transfronterizas. Hacer frente a tasas e impuestos inesperados en el momento de la entrega afecta negativamente a la experiencia de compra y puede reducir la tasa de retención de clientes. Los minoristas y las marcas que presentan un cálculo final de los aranceles e impuestos que se deben pagar en un pedido y permiten a los compradores abonarlos por adelantado en el momento de la compra, ofrecen al comprador una imagen completa de los costes que conlleva, lo que incrementa la tasa de conversión. De hecho, más del 80% de los compradores online optan por pagar por adelantado las tasas de aduana e impuestos durante el proceso de compra cuando se les ofrece la opción.[4].

Conoce los mercados a los que vendes

Los mercados difieren en muchos aspectos: divisas, normativas e impuestos de importación, métodos de pago y comportamientos y preferencias de los compradores… Por lo tanto, los comerciantes que deseen penetrar en los mercados internacionales deben asegurarse de que sus precios no solo se muestren en la moneda local, sino que también se efectúe el redondeo de acuerdo con las convenciones del mercado. También deben ajustar sus métodos de envío según los precios habituales en los mercados internacionales y ofrecer procesos de devolución fáciles y adaptados a las preferencias de los compradores locales.

Comprender las diferencias entre los mercados y ofrecer a los compradores de cada uno de ellos una experiencia de compra fluida y localizada, adaptada a sus preferencias y comportamientos, es la clave del éxito de las ventas transfronterizas. Los datos de Global-e muestran que, al localizar el recorrido del cliente en su tienda web actual, los minoristas y las marcas experimentan un aumento medio de más del 60% de la tasa de conversión del tráfico internacional[5].

Elige un socio de confianza con un historial demostrado

Dominar todos los aspectos de la localización, adaptando la oferta internacional a todos y cada uno de los mercados y manteniéndola al día de los constantes cambios en las normativas del mercado y la demanda de los consumidores, es extremadamente complejo y casi imposible de conseguir por los propios comerciantes.  

Asociarse con un proveedor de confianza que cuente con una solución de comercio electrónico transfronterizo de éxito es una parte esencial de este trabajo, que resultará además más rentable y eficiente, permitiendo llegar al mercado más rápidamente.

El mercado del comercio electrónico transfronterizo crece cada año y las oportunidades son ilimitadas. Es el momento de iniciar el viaje y ampliar tu huella transfronteriza online, maximizando tus ventas e ingresos internacionales.

Global-e es la plataforma líder en el mundo que permite y acelera el crecimiento del comercio electrónico transfronterizo directo al consumidor. Con Global-e, los minoristas y las marcas incrementan la conversión del tráfico internacional y aumentan las ventas ofreciendo a los clientes de más de 200 lugares de todo el mundo una experiencia de compra localizada totalmente fluida.

Global-e hace que vender a escala internacional sea tan sencillo como hacerlo a escala nacional. Nuestras soluciones integrales de comercio electrónico combinan las mejores capacidades de localización, los modelos de inteligencia empresarial basados en big data, una logística internacional optimizada y una amplia experiencia transfronteriza, lo que permite a los minoristas vender desde y hacia cualquier lugar del mundo y expandir su marca de forma sencilla por todo el mundo.

Global-e opera desde siete sedes en todo el mundo y es el socio elegido por cientos de minoristas y marcas globales en Estados Unidos, Europa y Asia.

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